Ud. es mi enemigo Doctor, y punto…

La humillación moral y atropello físico que recibió el colega Vladimir Galavis, respetado cirujano oncólogo, en la marcha de la Salud del día 22 de mayo ha retumbado en los corazones de millones de venezolanos y ha llenado de vergüenza y desafuero la condición humana. Cómo es posible que a cambio de afecto y diálogo se reciba a gran presión chorros de agua que lanzan al suelo a un venezolano que por años se ha dedicado a salvar vidas. La pregunta inacabable que no deja de estremecer la razón es: ¿Qué daño le ha hecho este hombre de bien y de ciencia a este funcionario para ser tratado así?

La respuesta es obvia: Los militares reciben órdenes, los militares forman parte de una organización que por años se dedica a resocializarlos en función de la agresión como gran objetivo. Es imposible esperar reacciones diferentes, es simplemente engañarse, el superior ordena, y el militar cumple.

Hasta donde llegarán las ordenes macabras para seguir atropellando, torturando y matando venezolanos, es la incógnita. Qué se necesita para que los militares superiores cambien sus órdenes y se integren a las exigencias de la mayoría de los ciudadanos, es un interrogante poblado de interrogantes. Las calles de Venezuela están invadidas de militares que salen a buscar a sus “enemigos”: El pueblo. Las calles de Venezuela están invadidas también de seres entrenados, aupados o pagados por el régimen para matar y delinquir: Los grupos paramilitares.

Venezuela es un país en guerra, con millones de seres llamados Vladimir Galavis y una ínfima minoría de enemigos del pueblo que siguen las órdenes tenebrosas de sus superiores y del gobierno. El colega Vladimir Galavis después de ser lanzado al pavimento se levantó, se apoyó en uno de sus jóvenes alumnos y con mayor coraje e hidalguía que al inicio de la marcha abrazo a los millones de venezolanos que junto con él se han convertido en fuerza infinita y gigantesca. Y con las palabras del hombre con sabiduría y señor con dignidad hizo la siguiente indicación: Ningún cáncer, por maligno que sea ha logrado destruir el espíritu libertario de este gran pueblo que son los venezolanos.

Luis José Uzcátegui Médico psiquiatra y antropólogo ljuv2000@gmail.com @LuisJUzcategui